Anoche vi The Bells, el penúltimo capítulo de Juego de Tronos, y, aunque a diferencia de la batalla de Invernalia, fue entretenido y disfruté viéndolo, no deja de ser una muestra más de la espiral de decadencia en la que se ha sumido el guión desde que dejaron atrás los libros. Dejadme que os cuente porqué.
Atención, SPOILERS, estáis advertidos.
El capítulo empieza genial, con Varys tramando en la sombra, Tyrion conspirando delatándolo a la reina pero al mismo tiempo conspirando para salvar a sus hermanos, Jon manteniéndose fiel a su palabra pero rechazando a Dany como amante... la clase de intrigas y personajes divididos en sus lealtades que quería ver.
Entonces empieza la batalla, y no voy a negarlo, es algo alucinante de ver. El momento en que Drogon revienta la puerta me hizo saltar del sofá, literalmente. Así es como los dragones deberían ser, así es como los vimos comportarse en Mereen o el Muro o el Camino Dorado, así es como los describen los libros, capaces de derretir los muros de Harrenhal.
El problema es que, tras ver esto, tras ver lo que un dragón es capaz de hacer a un ejército, una flota o una ciudad, es inverosímil creer que pudieran perder la batalla contra los muertos o que Euron derribara a Rhaegal, y esto no es una crítica a este capítulo, sino a los anteriores.
Creo que deberían haber matado a Rhaegal en este capítulo, con un escorpión, después de que sonaran las campanas. De esa forma, la reacción homicida de Dany estaría más justificada y no habría inconsecuencia en la efectividad de los escorpiones de un capítulo a otro.
Al menos, enlazan muy bien con las visiones y profecías de una sombra volando sobre Desembarco del Rey, las tres traiciones y la sala del trono en ruinas cubierta de nieve, que ahora descubrimos que es ceniza.
Aparte de Drogon arrasando la ciudad, el capítulo no tiene mucho más. Arya pasa mucho tiempo en pantalla, pero no hace nada y sólo sirve para mostrarnos escenas del interior de la Fortaleza Roja; y Jon es prácticamente un extra a merced de la voluntad de Dany que solo pone caras sin influir en lo que ocurre a su alrededor. Todo un paso atrás para un personaje que siempre ha sido proactivo y ha tomado siempre sus propias decisiones, aunque fueran en contra del orden establecido.
El esperado duelo entre los hermanos Clegane fue bastante soso y nada tiene que ver con los combates singulares que hemos visto en el pesado, entre ellos dos mismos en la primera temporada sin ir más lejos. Al menos Qyburn tuvo un final apropiado, leal hasta el final y destruido por sus propias creaciones. No se cual de la dos me sorprende más.
Jaime y Cersei mueren juntos en una escena bastante emotiva, que por desgracia ignora la profecía que decía que un Valonqar (hermano menor) estrangularía a Cersei hasta la muerte. Pero lo que más me molesta es como tiran por la ventana 7 temporadas de desarrollo de Jaime, uno de los personajes qué más había evolucionado en su arco de redención, sólo para darle la oportunidad de luchar contra Euron en otro combate singular sin nada que destacar y matarlo abrazado a Cersei.
Y la escena final con el caballo... ¿qué se supone que tengo que sentir? Por favor, que alguien me lo explique. Ni que fuera Nymeria...
Tras las buenas impresiones que me había causado el capítulo anterior, The Bells vuelve a buscar la solución más simplista para cada interrogante e hilo argumental. Hagamos una rápida lista.
¿Por qué Varys confiesa a Tyrion que va a traicionar a la reina en lugar de callarse? Porque sí, no había ningún plan oculto en marcha.
¿Qué significa la cara de duda de Tyrion al pedir a Varys que no apoye a Jon? Nada, termina delatándolo tal y como dijo que haría.
¿Qué pretende hacer Jaime cuando deja a Brienne y viaja al sur? Exactamente lo que dijo que iba a hacer, tirando por tierra todo el desarrollo que habían hecho para el personaje.
¿Cómo reacciona Euron a la noticia del hijo de Cersei? De ninguna forma, no le importa o no se entera.
¿Qué planea Cersei? Nada, ni trampa, ni plan b, ni destrucción masiva por fuego valyrio... nada.
¿Que planea Qyburn con aquel brazo que se quedó de un zombie al final de la temporada 7? Otro nada.
¿Que planea Qyburn con aquel brazo que se quedó de un zombie al final de la temporada 7? Otro nada.
¿Cómo va Dany a igualar la balanza de la guerra? De ninguna forma, los dragones aumentan su efectividad y los escorpiones la pierden de un capítulo a otro, casi como un parche de un videojuego.
¿Por qué Qyburn ordenó a Bronn ejecutar a Jaime y Tyrion cuando aparentemente ella no quería hacerlo? Porque los actores que hacen de Bronn y Cersei están divorciados y no hacen escenas juntos, pero Qyburn siempre fue leal a la reina.
¿Qué pinta la compañía dorada en todo esto? Nada, son solo carnaza. De verdad que no entiendo ni para que se molestan en introducirla a lo largo de 3 temporadas.
Y eso por no hablar de los personajes que simplemente se han desvanecido de la existencia, como Asha Greyjoy, Daario Naharis o Ellaria Arena como mínimo.
Lo único que me hace mantener un mínimo interés es saber qué planes ha puesto en marcha Varys, que sin lugar a dudas estaba tratando de envenenar a Dany al principio del episodio. ¿A quién escribía? ¿Porqué quemó la última carta si ya sabía que le iban a arrestar de todos modos?
Como dije tras los primeros capítulos de la temporada, desde que la serie se alejó de los libros las tramas se han ido simplificando, pero en ningún momento ha sido tan evidente la falta de guía como en esta última temporada, donde toda la complejidad y las capas entretejidas de historias han desaparecido por completo y a los personajes más inteligentes parece habérseles secado el cerebro.
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