Este libro es claramente para quien le guste la ciencia ficción dura y la idea de un primer contacto alienígena, pero alienígena en todo su significado.
No estamos hablando de seres humanoides, de coloridas apariencias y dispar número de apéndices, pero en el fondo, humanos. Estamos hablando de un mundo de un único habitante, de una especie con su propia forma de percibir e interactuar con su entorno, completamente inasequible a nuestro entendimiento; de una gelatina metamórfica del tamaño de un océano, con sus "olas", sus "mareas", su "espuma"... y pongo todo entre comillas porque son símiles muy imperfectos. Es mucho que procesar. Avisados estáis.
En contraposición, la historia es bastante sencillita y tiene a cuatro personajes contados: sigue al nuevo tripulante de una estación científica, en órbita en torno al planeta, y los extraños sucesos que allí acontecen tras haber saludado al "oceano" con una descarga de rayos X. Es todo una especie de misterio psicológico, sin nada realmente desagradable o de mal gusto, pero que aún así consigue revolverte un poco por dentro. Supongo que espeluznante es la palabra que estoy buscando
Trata temas como la fragilidad de nuestra propia mente, o la insignificancia del ser humano frente a la inmensidad del cosmos, y el último capítulo tiene una reflexión interesante sobre el concepto de un dios imperfecto, pero lo cierto es que la trama me ha aportado poco.
Lo de los narradores poco fiables es algo que no acaba de encajar conmigo, pero es que entretenido, lo que se dice entretenido, el libro no es. Es muy sesudo, más un ejercicio de imaginación que otra cosa. Hay capítulos en los que parece que estás leyendo la introducción a un artículo científico sobre este mundo/ser ficticio. Se habla de la bibliografía, de los autores, de las corrientes de pensamiento, de si este refutó al otro, de si aquel influyó al de mas allá, que si teorías, que si hipótesis...
Como ejercicio de imaginación y lectura dirigida a expandir los horizontes de nuestra mente y simplemente tratar de imaginar otras formas de vida, de inteligencia, de comprender interactuar con el universo, Solaris es un 10. Quizá pueda estar incluso a la altura de Los Propios Dioses, de Aasimov.
Ahora, como historia, no puedo darle más que un 5. No he llegado a conectar con los personajes, la evolución de la trama y el misterio al principio me tenía intrigado, pero ese interés ha decaído en indiferencia, y el clímax final me ha resultado tan abrupto como insustancial. Es como si todo lo que ha ocurrido no condujera a nada. Envían un informe, sí, ¿pero qué ocurre luego? ¿Cómo responde la humanidad, la comunidad científica? ¿Qué hacen los personajes con esta nueva información y situación? Todo queda en en un incierto.
Al final, paradójicamente, lo que más me ha gustado han sido esos volcados de información sobre las distintas expediciones, y las generaciones de científicos que han estudiado el planeta/criatura, con sus teorías y observaciones. Con sus detalladas descripciones de la "geografía" del océano y de fenómenos que podemos imaginar pero no comprender. Ese devenir de la ciencia, de teorías que chocan, y campos de estudio que tras una década bajo los focos son de pronto abandonados, cargados a hombros de un último genio... es inspirador, y está cargado de esa pasión que acompaña a la investigación y descubrimiento. A veces hasta me daban ganas de parar, cerrar los ojos y simplemente, imaginar.
Así pues, lo dicho. La historia, sin más. La idea tras la historia, impresionante. Si lo vais a leer, que sea con las expectativas adecuadas.
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