La Tierra Errante | Cixin Liu

Este ha sido mi primer contacto con la literatura china y tengo que reconocer que, cuando lo empecé, pensaba que se me iba a hacer más extraño, pero no; prejuicios infundados. Más allá de que los nombres son chinos y las ubicaciones predominantes son ciudades y áreas de China, el libro se lee y se entiende tan bien como otro cualquiera. 

Las temáticas que predominan en esta antología son la capacidad de superación y supervivencia, y una ciencia ficción extrema, con fenómenos de escala planetaria en los que la destrucción de la Tierra suele andar acechando a la vuelta de la esquina. Además, varios relatos cruzan los límites de la imaginación para mostrarnos planetas, mundos, sociedades y universos radicalmente diferentes al nuestro. 

Creo que todos los relatos pueden entenderse bien sin necesidad de gran conocimiento de física, pero es cierto que muchos de ellos tratan con fenómenos fuera de la escala ordinaria, como pueden ser distancias que se miden en años luz, las altas densidades que se alcanzan en el núcleo de la tierra, los efectos gravitacionales de unos planetas sobre otros, o el paso del tiempo cuando se viaja a una velocidad cercana a la de la luz. 

Como en toda antología, hay historias mejores e historias peores, y otras que no tengo claro que se puedan calificar de historias, y es por eso que resulta difícil cortarlas todas por el mismo patrón, así que vamos a ir una por una. Aunque, como lo he leído en inglés, puede que la traducción de los títulos no sea del todo correcto. Me lo perdonáis, porfi.  

LA TIERRA ERRANTE

La gran historia, la que lleva el libro en la portada. ¿Qué tal está? Pues no está mal, pero dista de ser la mejor. 

El relato nos habla de futuro en el que la humanidad debe dejar el sistema solar, pero en lugar de hacerlo en naves, se lleva la tierra entera consigo, usando enormes motores de reacción para sacarla de órbita. Y esa es una gran premisa, pero no es eso (o no es solo eso) de lo que va esta historia. El concepto que se explora aquí es cómo la lucha por la supervivencia destruye y transforma no solo el planeta, sino la sociedad y la forma de pensar de las personas, poniendo un frío utilitarismo por encima de todo.  

Un fragmento que me ha llamado particularmente la atención es cuando se produce una rebelión a consecuencia de la diferencia de pareceres entre la minoría de científicos informados y la gran masa de la opinión popular; hay quién cree que todo ha sido un montaje, que no tenían que haber dejado el sistema solar, y que es todo propaganda del gobierno para hacerse con el poder... Y no os digo cómo acaba la cosa, pero quería mencionarlo porque es un tema que está muy a la orden del día, aunque se escribiera hace veinte años. 

Por supuesto, no puedo dejar de hablar de este relato sin compararlo con la película: no tiene nada que ver. En la película todo gira en torno a las valientes acciones de los mecánicos durante una de las maniobras del viaje. El relato, por el contrario, abarca la totalidad del viaje, y trata de reflejar los cambios que este produce en las personas, sin centrarse en un instante u otro. Y por no centrarse, el relato no se centra ni en el protagonista, sino que este es un mero espectador y narrador de lo que ocurre en el mundo.

Por si os interesa, os dejo por aquí mi reseña de la película. 

MONTAÑA

Este es uno de los relatos que tiene poco o nada de historia, pero mucho de ejercicio de imaginación que recuerda a Los Propios Dioses, de Isaac Asimov. 

Empieza con la aparición de una nave alienígena, cuya gravedad crea una enorme montaña de agua en el océano, y por supuesto, alguien decide escalarla. Esta primera parte nos muestra una visión del alpinismo, basada en el respeto a la montaña, y los principios de supervivencia y superación; qué está bien, pero tampoco es gran cosa. 

Lo realmente interesante es todo lo que viene a continuación: la presentación de un planeta y una sociedad totalmente distinta a la nuestra, y la evolución de la misma a lo largo de los años. Pensadlo: un universo sólido con vacío en su interior, como el nuestro pero a la inversa, con burbujas en lugar de planetas. Un universo donde el espacio es limitado y por tanto el bien más preciado. Es brillante. 

Muy muy recomendable, si no como historia, sí como ejercicio de imaginación; algo que muchas veces solo está al alcance de la ciencia ficción.

SOL DE CHINA

Contada desde el punto de vista de un pobre agricultor de la china rural, esta es, para mi gusto, la mejor historia del libro; de esas que te hace reflexionar y mirar el mundo con otros ojos. 

Por un lado, presenciamos la revolución de la industria en el espacio. Sí, hoy en día todos los astronautas son personas altamente cualificada, brillantes, con varios doctorados, lo mejor de lo mejor... pero en el momento en que necesitas personal de construcción y mantenimiento que se cifra en cientos o miles, ese modelo no es sostenible. Y ahí el relato nos plantea su primera tesis: las titulaciones y el conocimiento son importantes, pero la experiencia, el trabajo duro y la capacidad de adaptación a situaciones adversas son cualidades igualmente válidas y deseables, incluso en una industria tan exigente como la espacial. 

Lo segundo que nos muestra el relato es la constante capacidad y deseo de superación del ser humano, en este caso plasmado en los objetivos en la vida que se marca el protagonista, y que dan forma a los títulos de cada capítulo. Al principio solo quiere trabajar, y el mero hecho de tener agua corriente le fascina. Al final, vuelve sus ojos hacia el espacio, y la exploración de las estrellas.

Y por último, tenemos una explicación bastante simplificada, pero que puede abrirle a uno mucho los ojos, sobre cómo, tras la carrera espacial y la llegada del hombre a la luna, parece que todo ese frenesí  y el interés del público general por alcanzar el cosmos y las estrellas se ha perdido, y es algo que solo persiguen unos pocos locos. Muy interesante para leer y reflexionar. 

EN BENEFICIO DE LA HUMANIDAD

Al igual que Montaña, este es otro relato que resulta muy extraño en su composición porque la historia que se nos plantea al principio no es la verdadera historia que nos quieren contar. Todo comienza con un asesino a sueldo, al que gente muy rica contrata para eliminar a gente muy pobre. ¿Por qué? No os lo voy a decir, porque ese es el quid de la cuestión. Poco a poco, el protagonista se hace esa misma pregunta, y sus dudas se ven intercaladas con pasajes de su pasado, de su adiestramiento, y del camino que lo llevó de matón callejero a uno de los sicarios más cotizados del mundo.

La segunda mitad del relato abandona tanto las preguntas como los pasajes sobre violencia, mafias, bandas y asesinatos, y nos ofrece respuestas; respuestas que nos llevan hasta una ingeniosa crisis de carácter financiero, a debates sobre la distribución de la riqueza, y a explorar la brecha entre ricos y podres. Al igual que Montaña, el relato termina con los alienígenas contando su historia al "protagonista", que pasa a ser poco más que un espectador a través del cual descubrimos un mundo donde esta brecha ha llegado a alcanzar su máximo exponente. 

Creo que Montaña es más original, pero este también es un buen ejercicio de imaginación, llevando una situación familiar hasta su extremo más deformado. 

CURSE 5.0

Y llegamos al peor relato del libro. Curse 5.0 trata sobre un virus informático, y no, no nos cuenta lo que piensa o hace el virus. Es una especie de recopilación de su historia, de su evolución  y de sus versiones, como la que haría un historiador hablando de un libro o un documento antiguo. 

Y en paralelo a esto, tenemos al propio Cixin Liu como personaje, escrito en tercera persona, viviendo cual vagabundo, haciendo metareferencias a sus otros libros... y sinceramente, no entiendo qué aporta una cosa a la otra, todo el tema del virus es bastante predecible, y todo el tema de Cixin Liu es demasiado aleatorio como para tener ningún sentido. 

No sé qué pretendía conseguir o transmitir con esta historia, pero para mí es un fracaso total. 

LA MICRO ERA

Aquí tenemos otro relato que parte de una premisa poco original (la Tierra va a morir y mandan una nave a buscar otro planeta habitable), para luego mostrarnos un mundo original, completamente distinto al que estamos acostumbrados a ver o imaginar. 

Es un ejercicio idéntico al que hacía en Montaña o En Beneficio de la Humanidad. El "protagonista", que no es más que un mero espectador, se topa con unos alienígenas y estos le cuentan la historia de su mundo. Y ese es el verdadero relato, no la premisa de partida o lo que le ocurra o deje de ocurrir al "protagonista". 

En este caso, el mundo al que nos introducen es un mundo en el que los humanos tienen el tamaño de seres microscópicos, tratan a las bacterias como mascotas y viajan a bordo de motas de polvo. Es ingenioso, pero tampoco es un concepto tan nuevo como para que te dé un vuelco al cerebro. Al fin y al cabo, libros y películas sobre gente a la que reducen de tamaño hay muchos, desde la popular Cariño he Encogido a los Niños, hasta Viaje Alucinante de Asimov, y la escala microscópica de la física o la química no es algo que nos resulte tan ajeno. 

Si se hubieran ido a niveles cuánticos... eso ya sería otra historia. 

DEVORADOR

Esta es una historia que me ha sorprendido gratamente. Empieza con una premisa muy sencilla: una raza alienígena viene a devorar la Tierra, sus recursos y sus habitantes. Pero rápidamente evoluciona en un debate moral sobre depredación y supervivencia. y en una desesperada (aunque predecible) lucha por esta última. 

Pero lo que realmente me ha gustado y sí ha conseguido sorprenderme son los dos giros narrativos del epílogo, que de nuevo vuelven a tocar la tecla de ese debate sobre supervivencia competitiva que ya se introducía al principio del relato. Muy chulo. 

CUIDANDO DE DIOS

Ah, la sutileza de los paralelismos... Crees que vas a leer un relato de ficción y te encuentras con una historia sobre envejecer y el respeto a tus mayores. Hay alienígenas, claro, y naves espaciales, y todo lo demás, pero en esta ocasión los platillos volantes llegan a la tierra en busca de sustento, pues sus tripulantes no son sino los creadores de la raza humana, que en la juventud de su civilización, plantaron las semillas de la vida en la Tierra para que esta vida (los humanos) les mantuvieran cuando alcanzaran la vejez. 

Los paralelismos entre la infancia y la vejez, ya sea de una persona o de una civilización al completo, están muy bien planteados, e incluso las conclusiones finales, cuando hablan de explorar el cosmos, podrían traducirse como "sal de tu zona de confort", "viaja, ve mundo", "sienta la cabeza" o "forma una familia". 

Más allá de eso la historia no tiene gran cosa y más allá de la llegada de los extraterrestres, no es que ocurra nada, pero el simbolismo está fenomenal y puede ser muy interesante de leer. 

A TRAVÉS DE SUS OJOS

La historia gira en torno a unas gafas que permiten a otra persona ver (y también, oler, oír y sentir) todo lo que el usuario experimenta; y es un concepto chulo, pero la idea de un tipo que se va de vacaciones llevando las gafas de una astronauta, para que esta pueda experimentar las plantas y la naturaleza, aun estando tan lejos de casa, no es que sea particularmente trepidante de leer. 

Sin embargo, luego descubrimos que no es una astronauta, sino una terranauta, y que su nave no viaja por el cosmos, sino por el manto y el núcleo de la tierra. Y esa es una historia y una idea mucho más interesante. 

Las dificultades, la claustrofobia y el terror psicológico de semejante viaje son algo a lo que me gustaría que se hubiera dedicado más tiempo que al nombrar plantas y mojar los pies en arroyos. Pero Cixin vuelve a verse en la necesidad de usar esa artificiosa forma de narración, en la que nos da un falso protagonista, y una premisa que luego no llega a explorar, solo para que al final, alguien le cuente al protagonista, a grandes rasgos y sin entrar en detalles, la historia impresionante sobre la que debería haber escrito desde el principio. 

BALA DE CAÑÓN

Este último relato, por no ser menos, vuelve a emplear el recurso de la historia dentro de la historia. Qué sorpresa. Partimos de un científico que, tras descubrir un nuevo material, debe entrar en criogénesis, pues padece de leucemia y aún no existe cura; dejando así a su hijo con el dilema de permanecer en su tiempo con su madre, o criogenizarse con él. 

Pero esa no es la historia, no es más que el prólogo. Cuando nuestro "protagonista" despierta se encuentra una ´Tierra devastada y descubre que todos quieren matarle. En ese momento, como es habitual y hemos visto en otros relatos del libro, el "protagonista" se convierte en una excusa para que otro personaje le cuente la historia de todo lo que ha ocurrido desde que comenzó su hibernación, y concretamente, del proyecto al que llevó su nuevo material.  

Y es entonces cuando este último relato lleva el recurso de la historia dentro de la historia a un nuevo escalafón, porque todo lo que le cuentan sobre su tiempo en criogénesis no es más que una premisa, el punto de partida, para una tercera trama. Una trama que hace referencia y pretende actualizar el clásico Viaje a la Luna de Julio Verne. Una trama que me ha gustado mucho. Una trama que, de nuevo, me deja con las ganas de que se hubiera centrado en contarnos una de las tres historias, sólo una, esta final o la del proyecto intermedio, en lugar de pasar a vuelo de pájaro sobre todas ellas. 

En resumen, el libro tiene grandes ideas, pero no muchas historias. Sol de China es sin duda la mejor historia, y una que recomiendo encarecidamente, seguida por Devorador. Aunque podría argumentarse que realmente son los únicos relatos que pueden considerarse verdaderas historias. Y desde luego son los únicos que se centran en un único tema o concepto. 

Todas las demás, tratan de fusionar siempre dos ideas distintas, pero no de forma que tengan relación, sino empleando el artificio de la historia dentro de la historia, un artificio que rápidamente te ves venir y resulta algo cansado, porque sabes que el "protagonista" no es más que un espectador, y que la "premisa" no es más que una excusa, un instrumento que no se va a terminar de explorar y que solo sirve para llevarte hasta un segundo personaje que es quién cuenta la verdadera historia. Y eso hace que no te impliques emocionalmente en la primera mitad de cada relato. 

Además, esa verdadera historia suele ser mucho mejor que la trama inicial, pero, por desgracia, la vemos sólo desde la distancia, sin nombres o personajes, sin emociones, sin acciones, desde el foco lejano de un libro de historia. Montaña, por ejemplo, hace un brillante ejercicio de imaginación y nos presenta un mundo de una originalidad brillante, pero me gustaría que se hubiera desarrollado esa parte mucho más, incluso haciendo un libro entero de ello, en lugar de dedicar la mitad de las páginas al tema de escalar la montaña de agua. 

Y lo mismo ocurre con otras, como En Beneficio de la Humanidad, que está muy bien, pero parece que trata de contar dos historias distintas. 

Curse 5.0 es el único relato que puedo decir con total seguridad que no me ha gustado, y que no recomendaría leer, pero de la misma forma creo que muchos otros habrían sido mejores de centrarse únicamente en uno (y no dos) de los ingeniosos conceptos que tratan de plantear. 

Una última cosa que creo que merece la pena mencionar es la metanarrativa que tiene el libro, que es algo de lo que solo te das cuenta muy al final del libro. Las historias son independientes, en teoría, pero algunas de ellas ocurren en el mismo "universo" o "línea temporal". Por ejemplo, Cuidando de Dios es una precuela a En Beneficio de la Humanidad, y A través de sus Ojos guarda íntima relación con Bala de Cañón.

Las historias pueden seguir leyéndose de forma independiente, pero algo te vas a perder. Por ejemplo, cuando en Bala de Cañón mencionan a la nave Sunset 6, la carga emocional no va a ser la misma si has leído A través de sus Ojos, que si no es más que otro accidente sin un rostro que poner detrás.