De no ser porque el protagonista también se llama Takeshi Kovacs, me habría costado creer que este libro pertenece al mismo universo que su predecesor. Me encantó Altered Carbon , me encantó, pero Broken Angels no es solo que no esté a la altura; es que es simplemente malo. Si lo he terminado ha sido por orgullo y por un absurdo respeto a su predecesor. Cuando leí el primer libro de la trilogía quedé impresionado por las posibilidades que ofrecían las pilas, no solo dentro del universo, sino a nivel narrativo: Morgan podía poner a Kovacs en cualquier planeta, diez, cincuenta, cien años en el futuro, y continuar su historia en cualquier dirección, incluso empezar historias nuevas y tejerlas entre sí, como ya hizo en Altered Carbon con su pasado en Innenin. Ahora odio esa posibilidad. Este libro hace borrón y cuenta nueva hasta tal punto de que, un par de referencias aparte, ignora por completo su predecesor. Nuevo planeta, nuevos personajes, incluso Kovacs parece ser otra p...