Con mi limitado tiempo para videojuegos, raras son las veces en que juego al mismo juego dos o más veces, pero a veces hay uno que me gusta tanto, cuyo sistema de combate me fascina tanto con sus entresijos que, según lo termino, quiero jugarlo otra vez, aplicando todo lo que he aprendido en la primera partida. Y eso es lo que ha pasado con Horizon Forbiden West . El juego puede ser un poco abrumador al principio, con cuatro tipos de armas nuevas (lanzavirotes, lanzapicas, arco de guerrero y guantelete triturador) y tres nuevos estados (empapado, corrosión y adhesivo), además de un sistema de fabricación que te permite mejorar las armas usando piezas de máquina. Por si esto fuera poco, todas las armas y armaduras tienen habilidades pasivas, que las hacen muy diferentes entre sí, y algunas no funcionan igual que en el juego original. Por ejemplo, el fuego, que en Zero Dawn era un elemento clave, con el que veías desaparecer la vida de las máquinas, se ha vuelto casi inútil, y apen...