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Armas, Gérmenes y Acero | Jared Diamond

Hace ya más de un año que me propuse salir un poco de mi habitual dupla de ciencia ficción y fantasía, y leer, al menos, un ensayo al año, y este 2021, por recomendación de mi novia, ha tocado Armas, Gérmenes y Acero. 


Armas Germenes Acero Diamond

Hay un motivo por el que no suelo leer ensayo, y es que siempre termino con una doble sensación amarga: primero, la sensación de que se han dedicado más páginas de las necesarias para transmitir una idea, y que hay muchísima repetición y relleno. Y segundo, que las cosas que cuentan, por interesantes que puedan resultar, y pese a ser en muchos casos preguntas que de otro modo no me hubiera planteado, no consiguen generarme inquietud suficiente como para darles vueltas al cerrar el libro, ni consiguen afectar a mi vida de forma significativa.

Dicho lo cual... me he leído este libro en menos de una semana, casi sin darme cuenta, y eso es decir mucho. La premisa, planteada desde la primera página, es muy interesante, ¿por qué unas sociedades las avanzaron más rápidamente que otras? ¿Por qué los europeos desarrollaron tecnología moderna cuando los neoguineanos eran aún cazadores-recolectores? ¿Por qué conquistó España a los Incas y los Aztecas, y no al revés? La respuesta parece obvia: porque estaban más avanzados. Ya, ¿pero por qué? ¿en qué momento ganaron esa ventaja? ¿por qué son unos países ricos y otros pobres si todos partían del mismo punto y las capacidades de sus habitantes son idénticas? 

Las verdaderas respuestas son simples, casi intuitivas, pero al mismo tiempo fascinantes en su complejidad. Si este tema os llama la atención. 


Con esto no quiero decir que el libro no haya sufrido de mis habituales críticas a los ensayos. Hay páginas y páginas de repetición, igual que hay secciones muy interesantes y otras absolutamente exasperantes. Con un libro de narrativa, me veo obligado a verlo como un todo, una historia en su conjunto que puedes o no recomendar. Con un ensayo, no me veo en esta diatriba, y creo que es más que posible recomendar solo ciertas secciones del libro, así pues, allá vamos. 

Las primeras veinte o treinta páginas son para arrancarlas, echarlas a una hoguera y no volverlas a ver. No quiero ni imaginar cuánta gente habrá dejado este libro sin haber llegado si quiera al principio del libro. Terrible... Mi recomendación es leer los primeros párrafos, hasta que dice que va a tratar de responder a la pregunta de Yali, y luego saltar al capítulo 1 en la página 40. 

La primera sección del libro, "Del Eden a Cajamarca", no está mal, y es un prefacio necesario, pero la parte verdaderamente interesante del libro, la que te lees sin darte cuenta y devoras con avidez, es la segunda, a partir del capítulo 4, "El Poder de los Agricultores". Los capítulos 4 al 14 son 250 páginas que recomiendo encarecidamente. 

La recomendación, por desgracia, no puede ir mucho más allá. Los cinco últimos capítulos del libro son un absoluto tostón, con páginas y páginas de repeticiones. El capítulo 18, "Colisión entre Hemisferios" es todo, absolutamente todo, repetido. 


Pero el libro no acaba donde acaba, no, no, no. Con el paso de los años, el autor ha ido añadiendo epílogos (anexos, debería llamarlos), hasta un total de cuatro, y una vez más, los hay que están muy bien y son muy interesantes, y los hay que son pura repetición. ¿Por qué? Porque añade el epílogo a continuación, pero no modifica el texto original, de forma que si el epílogo expande en un tema ya tratado, lo vas a leer dos veces. 

El primer epílogo, en el que trata de justificar que la historia es tan ciencia como lo es la física o la química, es demencial, no es más que un arrebato de amor propio que nada tiene que ver con el resto del libro, y que os invito a ignorar. 

El segundo, en el que trata del particular caso de Japón, sin embargo, es muy interesante (más que los capítulos 15 a 19), y debería haberse añadido al contenido central del libro, en lugar de aparecer aquí como epílogo o anexo. 

El tercer epílogo, bautizado simplemente "epílogo de 2003" es mera repetición de lo que ya cuenta el libro o los otros epílogos, tratando de crear paralelismos con el mundo empresarial. De nuevo, prescindible. Es como si el autor se hubiera escrito su prefacio o notas del editor, esas que tan frecuentemente aparece al principio de muchos otros libros. 

Sin embargo, el último añadido, "los países ricos y pobres", de 2017, es muy interesante y si constituye un verdadero epílogo a modo de cierre para todo lo que ha descrito el libro. 


Y eso es todo. Luego están las lecturas complementarias, 40 páginas de ellas, menuda lista, pero eso nos lo vamos a saltar. El libro me ha gustado, tiene partes muy interesantes, que ya he mencionado, pero como ocurre con todos los ensayos de este estilo que he leído, parece que hay un grosor estándar para el libro, que ha de cumplirse de la forma que sea, llevando a paginas de relleno, constantes repeticiones y secciones que directamente os invito a ignorar. 

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