Rise of the Ranger (The Echoes Saga #1) | Philip C. Quaintrell

Este libro es como una de esas pelis de serie B, que quizá no sean muy buenas, ni tengan los mejores efectos especiales, ni sean particularmente originales. Puede que incluso te avergüences un poquitito de disfrutarlas, pero no por ello resultan menos entretenidas. 

Al principio incluso parece que lo que estás leyendo es un fanfic. Hay un cazador de monstruos gruñón, con una marca que le cruza el ojo, larga melena gris y dos espadas a la espalda, una de acero, otra de plata... puede hacer algo de magia, su único amigo es su caballo, tiene poderes sobrenaturales gracias a un elixir que le hicieron tomar de joven... vamos, que solo le falta llamarse Gerardo de Rubia. 

Por suerte, la novela no se atasca ahí y evoluciona favorablemente con la introducción de múltiples personajes y arcos narrativos que van confluyendo entre sí a medida que avanza la trama. Hay una pareja de caballeros, repudiados por su orden, que están buscando al cazador de monstruos; hay un grupo de elfos operando tras las líneas enemigas, en busca del modo de burlar una tormenta arcana para infiltrarse en una isla fortaleza; hay una princesa que cruza el mar para, bajo el pretexto de forjar una alianza, iniciar una guerra en la que no cree; hay una reina inmersa en una expedición a través de la jungla, en busca del último dragón, y un estudiante de magia a punto de graduarse, que no quiere saber nada de libros y bibliotecas, y solo busca batirse en duelo y vivir aventuras. 

Como veis, un elenco de personajes, ambiciones, misterios y situaciones que dan al libro bastante dinamismo. De hecho, dos de estos personajes "secundarios" me han parecido mucho más complejos e interesantes que no-Geralt.

De todos modos, el desarrollo de estos hilos no deja de ser bastante derivativo, tampoco nos llevemos a engaño. Que si el señor oscuro y su inminente retorno, que si la profecía, que si el elegido, que si los cinco lugartenientes, que si el anillo que el señor oscuro necesita para regresar... Aún así, el libro logra alcanzar una cierta personalidad propia y aportar de vez en cuando elementos originales bastante chulos. 

La prosa es algo amateur, y acaba por resultar un tanto repetitiva, sobre todo en las escenas de acción. La magia no tiene ningún tipo de reglas y los personajes pueden hacer en cada momento lo que el guión precise. Y el nivel de verosimilitud se aproxima más a estos animes donde un tío se enfrenta a cincuenta sin ningún problema, o donde una patada te manda volando a través de un muro, y donde todos los personajes son increíblemente rápidos, e increíblemente fuertes, e increíblemente competentes y poderosos... 

En resumen, Rise of the Ranger es un guilty pleasure que he disfrutado bastante. No es buena literatura, parece escrita por un aficionado, pero es bastante decente. Es dinámico, entretenido, tiene acción a raudales, e ideas que pienso robar para mi próxima partida de rol.

¿Seguiré leyendo la saga? Tal vez. Me ha dejado con ganas de más, desde luego. No pagaría los 30€ a los que se vende en Amazon, pero en audilibro o kindle, que está incluido con la suscripción, pues oye...