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Cursor's Fury (Codex Alera #3) | Jim Butcher

En sagas largas, como es esta hexalogía, rara es la ocasión en que un libro que no sea el último me guste más que el primero. Será el factor novedad, será lo que sea. Sin embargo, puede que esta sea una de las excepciones a la regla. 

Cursor Fury Jim Butcher

Cursor's Fury es, para mi gusto, el mejor de los tres libros de la saga que he leído hasta el momento. Los dos anteriores acarrearon con todo el esfuerzo de introducir el mundo, la magia, las facciones; sembraron las preguntas y misterios, y es esta tercera parte quien cosecha los resultados. 

La trama, en la que no voy a entrar en detalle, no se hace de rogar. Bastante tensión dejó el anterior libro ya en el aire. El primer acto del libro arranca con conspiraciones e intentos de asesinato en múltiples frentes y de ahí no hace sino aumentar la tensión: guerras, traición, batallas, alianzas, rescates... 

Lo mejor es que, a pesar de semejante polvorín, el libro evitar caer de nuevo en lo que para mí fue el gran "pero" de los dos libros anteriores. Esa extenuante y desesperada batalla final, en la que confluyen todos los arcos, prolongada a lo largo de cientos de páginas. En su lugar, cada trama se resuelve en uno o dos capítulos, con escenas más breves, igual de intensas y mucho más satisfactorias. La confrontación final del arco de Amara, al más puro estilo Misión Imposible, me ha encantado. 

Y hablando de personajes, estoy disfrutando mucho con la evolución de Tavi, cómo va creciendo y asumiendo responsabilidades que nunca ha deseado, cómo logra aceptar quién es, su falta de furias... algo que ya había aparecido en libros anteriores pero que aquí alcanza un punto álgido. 

Otra evolución que me está gustando mucho es la de la relación entre Bernard y Amara, y sobre todo cómo ella, pese a ser una espía y una asesina, trata de mantener una integridad y una moral por encima de los nobles y confabuladores que rigen el mundo. 

Quien sufre quizá falta de páginas en este libro es Isana, que no tiene mucho papel que jugar en los acontecimientos. Sin embargo, sus escenas son probablemente las más importantes, porque dan respuesta a algunas de las preguntas que nos han perseguido desde el principio de la saga. ¿Quién es Tavi? ¿Qué pasó en la primera batalla de Calderon? ¿Por qué Isana odia a Gaius? ¿Por qué Tavi no tiene furias? Es una satisfacción tener por fin respuestas... 

Pero no penséis que con esto queda todo atado y que la saga queda a la deriva, sin nada que tire de ella, cual serie de televisión con la tensión sexual ya resuelta.  Los personajes han evitado la crisis por el momento, pero aún queda mucha tela que cortar, muchos villanos que derrotar, y la amenaza continúa. 

El epílogo, que me ha encantado, cierra con dos revelaciones de las de saltar de la butaca, y el último ultimísimo párrafo, con una sola frase, abre toda una nueva caja de preguntas. 

Vamos, que el libro me ha encantado, que estoy disfrutando un montón de la serie y que raro será si antes de fin de año no estoy leyendo el cuarto.

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